Tips de padrazo y/o padre del año

Me encantó publicar el post de “tips de madre NO primeriza” y recibir comentarios sobre vuestras anécdotas también, así que me puse a preparar una segunda lista de tips…pero se me ocurrió una idea: ¿y cuáles son las aventuras de los padrazos?¿cómo lo viven y se organizan?

Hoy comparto con vosotr@s algunas locuras del encantador papi de mis princesas, para mí el “padrazo del año” o “padre coraje”.

El auténtico padrazo…

• empapela todas las esquinas en forma de pico de los muebles de casa con goma espuma blandita color azul chillón y cinta americana. Lógicamente, estropeando por completo el diseño y estilismo del hogar, e incluso guardando muebles preciosos y caros en el trastero con la promesa de “será sólo un tiempo, seguro que no se estropearán y pronto tendrás de nuevo el salón de tus sueños, cariño”.

 

• quita los tiradores de los cajones de la cocina, salón y entrada de la casa, porque son altamente peligrosos. En su lugar, coloca cuerdas para poder tirar de ellas para abrir el cajón, o directamente tienes que dejarte las uñas y las yemas de los dedos. El resultado: acumulamos las cosas en la mesa y estanterías para no tener que hacer malabares para abrir el cajón sin tirador, y la bebé se entretiene en tirar de las cuerdas y abrir el resto de cajones una y otra vez.

• no ve necesario usar el cochecito y lleva SIEMPRE a sus niñ@ a cuestas. En nuestro caso, pensaba que con la segunda hija nuestro papi iba a cambiar esta costumbre, pero no ha sido así, y ahora lleva SIEMPRE a las dos princesas en brazos a todas partes. Y a ellas les encanta por supuesto. La respuesta de papi: “si ya mismo no querrán ni que las abrace, déjame disfrutar de ellas en brazos ahora que puedo”. Ya veis que ante esta respuesta de padrazo total, no tengo más remedio que sonreir y dejarles a su aire, y el cochecito lo uso para llevar las mochilas y muñecas varias.

 

• juega en la playa hasta parecerse a una “croqueta de arena”. Y es que al padrazo no le importa el sol, ni las piedras, ni acabar con arena hasta dentro de…las orejas, pero le encanta revolcarse con las princesas en la playa, en la orilla, haciendo castillos y túneles, lo que haga falta, incluso tartas con la arena. Por supuesto la #malamadre mientras cierra los ojos y se tumba al sol.

 

• no se lo piensa ni 1 segundo y compra para la hermana mayor un disfraz de 50 euros de Blancanieves. Sabe que no le va a durar mucho, y que los hay en Amazon por 15 euros prácticamente iguales, pero no puede evitar deslumbrarse por los brillos de la falta y el tul, directamente lo coge y se pone en la cola para pagarlo. ¿Qué dice esta malamadre? El de 15 euros le hubiese sacado la misma sonrisa a nuestra princesa, seguro que sí, pero…este modelo en concreto es preciosiiiiiiiiiiiiisimo sin duda. Pero si la idea de comprar el más caro hubiese sido de mami…otro gallo cantaría.

 

• insiste en que no hace falta que nuestros hij@s hablen inglés porque no las va a dejar salir de Córdoba. Y es que el iluso de nuestro papi le gusta pensar que sus princesas siempre estarán cerca, y afirma que “podrán ir a donde quieran, pero a las 10:00 en casa”. Le dejaremos que poco a poco se vaya haciendo a la idea, y mientras nosotras ya nos hemos apuntado a clase en Kids&Us, como os conté en el anterior post.

 

• plancha la ropa atrasada de 2 semanas un sábado a las 11:00 de la noche. Como podéis comprobar, los planes nocturnos cambian considerablemente cuando tienes peques, y además las tareas de casa se acumulan. Si a esto le sumas que mami agotada se queda dormida a la misma vez que echa a la bebé en su cuna, entonces a papi no le queda más remedio que entretenerse con la plancha y la tele en el salón.

 

• un día cualquiera llega a casa por la noche con una tarrina de helado de chocolate para la #malamadre. Y es que nuestro padrazo cuida y mima a sus princesas y a mami por encima de todo, y aunque a veces bromeo diciendo que estoy celosa de ellas porque se llevan toda la atención de papi, os confieso ORGULLOSA que él me quiere y se preocupa por mí y por mi felicidad como el primer día, me concede todos mis caprichos y me siento muy afortunada como esposa y como madre de esta familia tan genial que hemos formado.

 

Yo os seguiré contando más cosillas…pero espero vuestros comentarios sobre vuestros padrazos particulares.

¡PAPI, ERES NUESTRO HÉROE!